En Nueva York, exconvictos consiguen las primeras licencias de cannabis

La policía detenía al hermano de Naiomy Guerrero con frecuencia y una vez fue condenado por cargos de drogas cuando la marihuana era ilegal en Nueva York. Ahora está montando un negocio de cannabis legal, un nuevo mercado prometedor lleno de trampas.

El estado de Nueva York está ofreciendo sus primeras 150 licencias para vender legalmente cannabis a personas, y sus dependientes, que hayan sido condenados por delitos relacionados con la droga, incluida la venta.

La política, implementada por los líderes demócratas del estado, busca compensar a las comunidades afroamericanas e hispanas cuyos miembros fueron arrestados y condenados de manera desproporcionada durante las décadas en que fue ilegal.

«Es un momento tan emocionante para mi familia», dijo Guerrero, de 31 años, estudiante de doctorado en historia del arte cuyos padres son de la República Dominicana.

«Sobre todo teniendo en cuenta de dónde venimos y todo lo que hemos pasado con las políticas discriminatorias que ha tenido la ciudad, como parar y cachear», dijo a la AFP.

El mes pasado, Guerrero fue uno de los primeros 28 solicitantes exitosos en recibir su licencia para abrir una tienda oficial y vender cannabis cultivado localmente.

Las licencias llegan más de un año después de que el estado de Nueva York, hogar de 20 millones de personas, legalizara el consumo de cannabis.

En la ciudad de Nueva York, el olor a hierba ahora es tan omnipresente como los taxis amarillos y los rascacielos brillantes.

El gobierno de la ciudad espera que la industria legal del cannabis genere $1.300 millones en ventas el próximo año y entre 19.000 y 24.000 puestos de trabajo en tres años. Representa ingresos fiscales muy necesarios.

diferencias raciales

Jeremy Rivera, es otro neoyorquino que quiere ganar dinero. Fue declarado culpable de un «delito de drogas no violento, incluido el cannabis» en 2016. Salió de prisión en 2018 y prometió no volver nunca más.

El hombre de 36 años utilizará su conocimiento sobre el cannabis y su perspicacia comercial para abrir una tienda de marihuana al este de la ciudad en Long Island.

Rivera, muy tatuado, que creció rodeado de delincuencia en el distrito de Queens, espera estar entre el próximo grupo de licenciatarios.

«Quiero ser ese faro de luz que le muestre a la gente: ‘Escucha, lo he hecho. Fui pandillero durante 20 años, traficante de drogas todo el año. Tomé la decisión de dejar ese estilo de vida'». «, dijo a la AFP.

Además del fallo sobre el cannabis, los solicitantes también deben poseer un negocio rentable para ser elegibles para una de las primeras 150 licencias, que precederán a la apertura total del mercado.

En 2018, un informe estatal estimó que hubo 800.000 arrestos por posesión de marihuana en los 20 años anteriores.

En 2017, la mayoría de los arrestados eran negros (48 por ciento), mientras que los hispanos representaban el 38 por ciento de los arrestos.

«La prohibición negó oportunidades a las personas, provocó la desinversión en las comunidades, separó a las familias», dijo Tremaine Wright, presidente de la Junta de Control de la Oficina de Gestión de Cannabis (OCM) de Nueva York.

Guerrero dice que en la década de 2000, la infame política de parar y registrar del Departamento de Policía de Nueva York, que apuntaba desproporcionadamente a personas de color, significaba que “no podíamos estar afuera sin que la policía nos detuviera.

«Era simplemente vivir en un estado constante, constante de vigilancia y acoso», recordó.

Si bien el programa de cannabis es ambicioso, los expertos dicen que la implementación tendrá sus desafíos.

«Todavía estamos al comienzo de nuestro viaje por la equidad social. Necesitamos educación, necesitamos financiación», dijo Desmon Lewis, cofundador de The Bronx Community Foundation, que ayuda a los solicitantes.

Venta ilegal

La semana pasada, el medio local NY Cannabis Insider informó que el equipo encargado de recaudar $150 millones de inversionistas privados para el fondo estatal de $200 millones para apoyar a los minoristas no cumplió con un plazo importante establecido por el estado.

Esto genera preocupaciones de que los candidatos no puedan recibir las tiendas llave en mano que se les prometió.

«Para algunas personas, es muy confuso. Dependen de esta ubicación y estos fondos. Ahora es como si la arena se moviera bajo sus pies», dijo Eli Northrup, de la organización sin fines de lucro Bronx Defenders.

La fuerte competencia de los vendedores sin licencia, que se han visto alentados por la despenalización, también es motivo de preocupación.

Se han aprovechado de la falta de control desde la legalización, vendiendo en la calle, en parques y en tabaquerías que ya venden comestibles, pre-rollos y flores con THC.

Pero Rivera solo ve posibilidades.

«También habrá personas que nunca se han sentido cómodas comprando en el mercado ilegal y que ahora querrán comprar a un proveedor autorizado de buena reputación», dijo.

«Este es el comienzo de los próximos 100 años de venta de marihuana», añadió, fumando un porro largo.

Fuente https://notiplaneta.com/en-nueva-york-exconvictos-consiguen-las-primeras-licencias-de-cannabis/ NotiPlaneta Notiplaneta, las últimas noticias del mundo.